La primera semana de la invasión de Rusia a Ucrania está dejando muchos daños, tanto humanos como materiales. Uno de estos últimos se ha cobrado una víctima importante, la del avión más grande del mundo. Un ataque aéreo lanzado por Rusia sobre el aeropuerto de Gostomel, cercano a la capital ucraniana, ha resultado en la destrucción del AN-225 ‘Mriya’ ucraniano.
Así lo confirmó el canciller del país invadido, Dmitro Kuleba. «Rusia puede haber destruido nuestro ‘Mriya’ (‘sueño’ en ucraniano), pero nunca podrán destruir nuestro ‘sueño’ de un estado europeo fuerte, libre y democrático. ¡Venceremos!», esto es lo que Kuleba publicado en Twitter.
El avión debía salir del aeropuerto el 24 de febrero, pero el estallido de la guerra impidió que todos los vuelos salieran del aeropuerto, informó la BBC. «Estuvo así durante tres días hasta que se destruyó», explicó una fuente de la consultora de medios británica.
Restaurarlo llevará más de 5 años
AN-225 «Mriya» fue completamente quemado después del ataque aéreo. Se estima que la restauración de la aeronave llevará más de cinco años, el proceso de recuperación costará más de 2.600 millones de euros y los trabajos no se completarán hasta el final del conflicto.
El propietario del avión, Yurii Gusev, jefe de la empresa estatal de transporte e infraestructuras de Ucrania, Ukroboronprom, lo dejó claro y aseguró que la empresa quería que «la Federación Rusa lo pague» porque se incendió.