Los medios de comunicación nacionales y extranjeros están haciendo circular un caso trágico en Brasil la semana pasada en el que un padre y un hijo murieron en un inesperado accidente aéreo como resultado directo de sus muertes.
Las víctimas fueron el ganadero Garon Maia y su hijo de 12 años. Volaron en un bimotor Beechcraft Baron 58 ($1,200,000) pilotado por un niño. Minutos después del despegue, el avión se estrelló en una zona boscosa.
Los restos del avión y los cuerpos del padre y el hijo fueron encontrados al día siguiente. Sin embargo, la tragedia de la familia Maya no terminó ahí, pues la esposa de Galón y la madrastra de Francisco se quitaron la vida a los pocos días del accidente.
La familia Maia es conocida en Brasil por su herencia agrícola y aeronáutica, y tanto el padre como el hijo son pilotos apasionados. Un vídeo que circula en las redes sociales que muestra al joven Kiko pilotando el avión bajo la supervisión de su padre ha suscitado un debate sobre las responsabilidades y precauciones a la hora de volar. El Centro de Investigación para la Prevención de Accidentes Aéreos ha iniciado una investigación sobre la causa del accidente.
El dolor de un ser querido en este momento es indescriptible. Que tu alma y tu corazón encuentren paz y consuelo. Nuestros pensamientos están con todos ellos en este doloroso momento. Nuestro más sentido pésame por la irreparable pérdida de su ser querido.





