El gobierno de República Dominicana anunció el lunes que cerraría su frontera con Haití y suspendería la emisión de visas a ciudadanos haitianos. La decisión fue tomada en una reunión del Consejo de Seguridad Nacional presidido por el presidente Luis Abinader.
La reunión del Consejo de Seguridad Nacional se realizó específicamente para abordar la situación en la frontera entre República Dominicana y Haití, que se ve afectada por la reanudación unilateral de las obras del Canal haitiano sobre el río Massare y el cierre de la frontera ordenado por el Presidente.
Según información proporcionada por el servicio diplomático y agencias de investigación estatales, los trabajos de construcción del canal fueron realizados de manera unilateral por particulares y sin el apoyo de las autoridades haitianas. Los proyectos fueron impulsados por empresarios y políticos haitianos para garantizar el suministro de agua para uso comercial.
El proyecto viola el artículo 10 del Tratado de Paz, Amistad y Arbitraje entre los dos países. Se cree que esta acción unilateral tiene como objetivo dañar al propio gobierno haitiano y provocar un conflicto con la República Dominicana.
Ante esta situación, el Consejo de Seguridad Nacional decidió tomar las siguientes medidas: suspender indefinidamente el ingreso de todas las personas involucradas en el conflicto y cesar la emisión de visas a ciudadanos haitianos hasta nuevo aviso.
Asimismo, se mantiene el cierre total de la frontera a través de Dahar, y al comercio terrestre, marítimo y aéreo si el conflicto no se resuelve antes del jueves.
Otra medida que se baraja es la reactivación de la toma aduanera de agua del río Dahabón en la cabecera del Canal La Vigía como medida de corto plazo para garantizar el abastecimiento de agua a los productores dominicanos.
La medida también sirvió para iniciar el proceso de construcción del proyecto de la Presa Don Miguel como solución final de largo plazo. El diseño del proyecto comenzó el año pasado, y se espera que la construcción demore unos 30 meses y cueste alrededor de P2.7 mil millones. La licitación comenzará inmediatamente.
Finalmente, el gobierno solicitó una reunión bilateral sobre niveles de aguas subterráneas entre ambos países para acordar una solución final.
El gobierno de la República Dominicana enfatiza su posición firme en salvaguardar la soberanía nacional y garantizar la seguridad nacional. Estas medidas tienen como objetivo proteger los intereses nacionales ante la situación en la frontera con Haití.