La trágica explosión que afectó al centro de San Cristóbal tuvo un profundo impacto en la familia del señor Abraham Toledo, así como a toda la comunidad dominicana. Su chofer, Andújar Lara, fue enviado a identificar los cuerpos de las víctimas y, según sus palabras, “el capo estaba devastado” ya que entre los asesinados estaban tres familiares suyos: su esposa, hija y suegro. .
Pasadas las 13:00 horas del pasado lunes 14 de agosto, se registró una potente explosión en la zona comercial de la intersección de las calles Padre Ayala y Modesto Díaz, cerca del Parque Central de San Cristóbal, provocando un desgarrador saldo. Hasta el momento, 27 personas han muerto, más de 50 han resultado heridas y se han causado muchos daños materiales.
Las autoridades hasta ahora no han podido determinar la causa exacta de la explosión, dejando a la comunidad en estado de shock y luto. Informes del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) indicaron que la explosión resultó en la destrucción total de cuatro edificios.
Víctor Ramón Montás, presidente de la Cámara de Comercio y Productores de San Cristóbal, compartió la magnitud del impacto económico de la tragedia. Además de los edificios destruidos, entre 60 y 70 establecimientos comerciales también resultaron afectados por la onda expansiva de la explosión.
En medio de la conmoción, las autoridades y la comunidad están unidas en su apoyo a las víctimas y sus familias, y en su esfuerzo por comprender y procesar este doloroso evento. Escuche a continuación las palabras del chofer del responsable de la Fábrica Toledo.

